El domingo 28 de diciembre cientos de habitantes de la zona noreste de la provincia se concentraron a los pies del monte Kákavos, cerca de la localidad de Skuriés, donde el Capital trasnacional, contando con el respaldo del Estado griego, está tratando de instalar una minería de oro. La manifestación de ayer ha sido una prueba más de que los luchadores no se dejan vencer por terrorismo de Estado, y que están dispuestos a seguir luchando contra la destrucción de sus tierras.

Fuente: Verba Volant
La marcha llegó hasta las instalaciones de las obras, donde se desplegaron pancartas y se gritaron lemas de contenido anti-minero. En este lugar estaban esperando las fuerzas represivas, alineadas frente a los manifestantes o dispersas por el bosque. Pronto los maderos rodearon a los manifestantes, y empezaron a disparar gases lacrimógenos y granadas aturdidoras directamente hacia ellos. En los enfrentamientos que sucedieron a esta carga policial se lesionaron varios manifestantes.

Algunos de los manifestantes denuncian haber escuchado a un oficial de la Policía admitiendo que no era capaz de controlar a los maderos de las denominadas fuerzas antidisturbios. No nos extraña: muchos de los miembros de la guardia pretoriana del Régimen son puros fascistas. En varias manifestaciones se han entregado a su tarea represiva con un afán muy particular. También, muchos manifestantes denunciaron que en varias ocasiones los maderos les insultaron y les amenazaron, diciéndoles que se prepararan para una represión mucho peor en el futuro en su vida cotidiana.

Por nuestra parte, hacemos un llamamiento para la difusión de las noticias sobre la inminente destrucción del noreste de Calcídica, y sobre la lucha anti-minera de sus habitantes y de la gente solidaria con su causa.