Un grupo de vecinos de Chos Malal y alrededores se organizaron como “vecinos autoconvocados” para rechazar el proyecto de exploración de cobre que impulsa la minera Southern Copper Argentina en el cerro Caycayén. Ayer mantuvieron una reunión en el local de la CTA Chos Malal con el abogado Germán Zúñiga, quien asesoró a la comunidad de Catan Lil en los reclamos contra la misma empresa.

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Fuente: Río Negro
La concejal de Encuentro por Chos Malal, Carina Benítez, señaló que, si bien las áreas en donde se realizará la exploración no están dentro del ejido de la ciudad, hay “preocupación” en la comunidad por la incidencia que podría tener la actividad sobre el ambiente y el río Neuquén. Frente a esto, se creó un grupo de “vecinos autoconvocados” que ayer tuvo un primer encuentro informativo.

Lo que se conoce hasta ahora es lo que se publicó en el Boletín Oficial del 8 de abril: un proyecto de exploración que se hará sobre una superficie de 2.852 hectáreas y que consistirá en la realización de cinco perforaciones con extracción de testigo. El área de concesión está integrada por la manifestación de descubrimiento “Vuelta del Cobre” y la mina “Caycayén II”.

Al lugar se accede transitando 5,5 kilómetros por la Ruta 40 desde Chos Malal hasta su empalme con la Ruta 6. Luego, sobre ésta se deben recorrer unos 13,7 kilómetros en sentido oeste hasta llegar a un camino rural y avanzar por 9 kilómetros. Además de esa localidad, está cercano a El Cholar y El Huecú.

El proyecto aún está en etapa preliminar, pues se encuentra dentro del período de observación y comentarios del informe de impacto ambiental.

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El director de Minería defendió el proyecto para Chos Malal

Carlos Portilla aseguró, también que la Justicia determinó que se puede hacer un nuevo llamado a audiencia pública por la mina en Loncopué.

Portilla, en declaraciones a Radio Nacional, explicó que el proyecto de la minera Southern Copper Argentina no tiene aprobación y que tomó estado público porque cada vez que se presenta un informe de impacto ambiental se publica, lo que implica, solamente, el inicio de un proceso administrativo. Sin embargo, un grupo de vecinos se organizaron para rechazar el proyecto y ayer mantuvieron una reunión con el abogado Germán Zúñiga, quien asesoró a la comunidad de Catan Lil en los reclamos contra la misma empresa.

El funcionario resaltó que el proyecto es financiado con “dinero de riesgo” y se va haciendo paso a paso, por lo que se va avanza, o no, de acuerdo a los resultados que se van obteniendo.

Además, el director aclaró que desde su organismo están “administrando una actividad que es licita y que no tiene nada que esconder”.

También se refirió a los proyectos mineros presentados para Las Coloradas y Loncopué diciendo que no fueron descartados. “Desde lo judicial se estableció que se puede hacer un nuevo llamado a audiencia pública (por Loncopué) y entiendo que en Las Coloradas también pero hay una realidad que no la podemos soslayar y es toda esta expresión social que se encuentra en contra de la actividad”, detalló.

Según Portilla en las manifestaciones en contra de la mina en Las Coloradas “participaron algunos vecinos” y “activistas ambientales, por así llamarlos, que provienen de todas partes del país y conforman una suerte de grupo que rápidamente se moviliza y se organiza para expresarse en contra de la minería metalífera en todo el país”.

Finalmente, aseguró que desde el Estado le piden a las empresas que demuestren que hay un consenso social al menos para escuchar un proyecto.